PUBLICIDAD Y ARTE

La existencia de la publicidad tal como la conocemos en nuestros días se fundamenta en la producción masiva de los bienes y la expansión de los servicios, lo que hace necesario su anuncio para asegurar su consumo.
La publicidad tiene como fin crecer demanda, por ello no es extraño que los productos más promocionados seas precisamente los de primera necesidad. Pero el fenómeno no queda ahí, la publicidad comercial es a la vez una importante presencia cotidiana y determina profundos cambios culturales de gran repercusión en los más variados ámbitos.
Esta situación ha traído como consecuencia la preferencia de la palabra “propaganda” en aquellas circunstancias en las que el mensaje da a conocer ideas, doctrinas, posiciones, etc. Prefiriéndose usar el termino “publicidad” cuando el mensaje tiene como fin especifico vender bienes y servicios. Lo cierto es que esta distinción apenas si se tiene en cuenta en el uso cotidiano. Y con razón puesto que – y cada vez mas aceptado- la oferta de bienes y servicios viene pareja a la promoción de un conjunto de ideas, una visión de mundo. Y de otro lado la difusión de los asuntos públicos, presentación de líderes políticos y sus ideas o doctrinas cada día adquiere mas espectacularidad y efectos propios de la publicidad comercial.
En resumen se puede definir al mensaje publicitario como el conjunto de medios y técnicas usados para divulgar ideas, personas, entidades, bienes o servicios y que buscan suscitar determinadas convicciones, actitudes y comportamientos en los individuos y en los grupos a los que se dirigen sus mensajes.

Fuente: Libro Juegos de verdad y mentira-publicidad y adolescentes en la TV limeña de Sonia Luz Carrillo